Stephen Sondheim: Un genio inmortal del teatro musical

El 26 de noviembre de 2021, el mundo perdió a Stephen Sondheim, el maestro que revolucionó el teatro musical. Esa misma noche Antonio Banderas interpretaba a Bobby en COMPANY en Málaga, y Carlos Latre era Pseudolus en la producción más reciente de GOLFUS DE ROMA en Madrid, la prueba de que el legado del genio sigue vivo, transformando escenarios en todo el mundo hasta la actualidad.

Con una carrera marcada por letras incisivas, melodías complejas y una narrativa teatral profundamente humana, Sondheim expandió los límites del género, explorando emociones, conflictos y matices que pocos se atrevieron a abordar. En España, su obra ha encontrado un público fiel y adaptaciones destacadas que demuestran que su impacto trasciende fronteras y culturas.  

El nombre de Sondheim está asociado a algunas de las obras más influyentes del musical de Broadway, como SWEENEY TODD, INTO THE WOODS o FOLLIES. En ellas, su genio brilló al construir personajes multidimensionales y desafiar las convenciones de la narrativa musical. Obras como COMPANY han encontrado un hueco especial en España, con la reciente versión liderada por Antonio Banderas, alabado por la crítica y por el público. Su enfoque único ha influido profundamente en el panorama teatral, inspirando a generaciones de compositores y artistas.  

Dentro del grupo de creativos que han llevado a los escenarios títulos de su obra, fue Mario Gas quien montó mayor número de : GOLFUS DE ROMA, 1993; SWEENEY TODD en 1995 y en 2008; A LITTLE NIGHT MUSIC en 2000 y FOLLIES en 2012, de todas la que mayor éxito obtuvo, la gran sorpresa de los Premios Max de aquel año, ya que se llevó los seis premios para los que estaba nominada.

La conexión de Sondheim con el público va más allá de las tablas. Su enfoque en la complejidad emocional y en una narrativa elaborada ha dejado una marca en aquellos que se acercan a sus trabajos. Su obra ha sido un puente entre el teatro musical clásico y contemporáneo, ofreciendo nuevas herramientas para entender y representar el género. Además, las traducciones y adaptaciones de sus piezas en España han logrado mantener la riqueza de sus textos, acercándolos al público hispanohablante sin perder su esencia.  

Tres años después de su partid, el compositor sigue siendo una figura imprescindible. Sus obras nos recuerdan que el teatro musical puede ser mucho más que entretenimiento: puede ser un arte profundo, reflexivo y transformador. En España, su legado continúa vivo, no solo en las producciones que llenan nuestros teatros, sino también en la influencia que ejerce sobre las nuevas generaciones de artistas. Como muestra de ello, este año GYPSY, con música de Jule Styne y letras de Stephen Sondheim se representa en Málaga y en Nueva York a la vez.

Sondheim nos deja un repertorio inmortal, invitándonos a explorar las complejidades de la vida a través de la música y la palabra.  

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