Octavio Bajonero dedicó su producción a la estampa, realizó piezas individuales, carpetas, imágenes para libros, obras gráficas tridimensionales e interactivas; también se dedicó a la pintura, así como a crear instalaciones, además, elaboró piezas de esmalte y joyería. En 2007, gracias a la generosa donación de su acervo personal, se creó el Museo Nacional de la Muerte, perteneciente a la Universidad Autónoma de Aguascalientes.
La Secretaría de Cultura y el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), así como académicos y alumnos de la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado La Esmeralda (ENPEG), recuerdan con respeto y cariño la trayectoria profesional y docente del artista y maestro, a un año de su deceso: 16 de julio de 2019.
En La Esmeralda formó varias generaciones de estudiantes en las técnicas de xilografía, litografía, linoleografía, grabado en metal y monotipos, técnicas que también fueron soporte de su producción artística.
Octavio Bajonero Gil impartió clases en la escuela del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) durante una década, tiempo en el que ayudó a visibilizar de manera entusiasta el trabajo de artistas emergentes. A principios de los años ochenta, organizó varias exposiciones con sus estudiantes en las que proponía la experimentación del grabado con el collage y el textil. Ejemplo de ello fue la muestra Innovaciones en el grabado, inaugurada en 1982.
En el libro Octavio Bajonero, 1960-2010, cincuenta años de grabador, la crítica, curadora e historiadora del arte, Graciela Kartofel, dedica un capítulo a la labor docente de Octavio Bajonero en La Esmeralda, en la que relata cómo su etapa experimental repercutió en el medio artístico de México. "...es allí donde inicia su serie Innovaciones en el grabado con la cual incentiva a sus estudiantes a utilizar técnicas formales, integrando diferentes materiales a obras elaboradas y experimentando los medios que le son propios."
En 1985, Octavio Bajonero fue nombrado subdirector académico de la ENPEG. Como educador promovió una docencia colaborativa y de reciprocidad en la que su labor también incluía continuar con su aprendizaje como artista. Entre sus discípulos se encuentran Roberto Turnbull, Georgina Quintana, Rocío Maldonado y Ernesto Torices.
El profesor Ernesto Torices, actual docente del Taller de Producción de Grabado de La Esmeralda, comenta (dixit): "El profesor Octavio Bajonero fue mi primer maestro de grabado y posteriormente mi compañero de trabajo. Disfrutaba su materia y entusiasmaba a sus alumnos; además de mucha obra gráfica y libros, también coleccionó numerosas piezas de barro de Ocumicho, Michoacán, donde el personaje central es el diablo".
El artista y grabador murió el 16 de julio de 2019 y la comunidad del INBAL
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