In crescendo. Así fueron las emociones que los alumnos de Piano para todos provocaron entre los asistentes al primer recital que ofrecieron. La presentación fue resultado de la preparación que han llevado a lo largo del curso propedéutico cuyo objetivo es integrar profesionalmente al mundo musical a niños y jóvenes que padecen alguna discapacidad.
El Salón 34 del Conservatorio Nacional de Música (CNM) del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) fue el escenario en el que se dio a conocer el primer resultado del curso que inició en el mes de abril de 2018.
Dirigido por los profesores Gabriel Sierra Fincke y Blanca Cruz, el proyecto atiende a diez alumnos de entre 7 y 18 años. Cinco de ellos padecen autismo; tres, ceguera total; uno, síndrome de Down y uno más, hipoacusia.
Ante Sergio Rommel Alfonso Guzmán, subdirector general de Educación e Investigación Artísticas del INBA; David Rodríguez de la Peña, director del CNM; profesores de la institución educativa del INBA, además de familiares y amigos, los jóvenes mostraron su talento interpretativo.
Los estudiantes -habitantes de la Ciudad de México, del Estado de México y Morelia, Michoacán- asisten los jueves al CNM con el objetivo de incorporarse próximamente, de acuerdo a las capacidades de cada uno, a clases regulares.
"A poco no todos son maravillosos", dijo Sierra Fincke al finalizar el recital e indicó que este es el primer resultado consecuencia de todo el trabajo que hay detrás, aquel que inició en la Escuela de Iniciación Artística (EIA) núm. 4 del INBA, pionera en el tema de inclusión.
Gabriel Sierra Fincke, profesor de piano con maestría en Innovación Educativa y coordinador del Taller de piano y sensibilización musical para personas con discapacidad en la EIA núm. 4 del INBA, agradeció el apoyo de las autoridades del INBA, de Sergio Rommel, de la maestra Blanca Cruz, así como el entusiasmo de David Rodríguez; esfuerzos que al conjuntarse hicieron posible el proyecto.
"El recital fue el gran logro de esta vez. Podemos ver resultados porque hay muchas ganas de hacerlo, desde la cabeza del INBA, hasta los que estamos día a día en el salón de clases".
Al proyecto se sumó la maestra Mercedes Gómez Benet, quien imparte clases de arpa a Alexa Regina Granados Herrera, de 12 años de edad. La arpista comentó que ha sido una experiencia maravillosa que le ha permitido aprender cosas nuevas, por lo que está feliz de haberse integrado. La flautista María Esther García Salinas, coordinadora del ciclo Círculo Virtuoso, que se lleva a cabo en el CNM, también mostró su entusiasmo e interés por unirse al proyecto.
"Seguramente pronto lo harán otros profesores y poco a poco vamos a hacer que esto crezca", dijo Gabriel Sierra y comentó que estos meses han sido de integración y aprendizaje para ambas partes. "Tenemos que conocerlos, ver cómo aprenden, interactuar con ellos y también que ellos mismos como grupo se conozcan y se apoyen".
El profesor señaló que la tarea fuerte que tienen por delante es impulsar al grupo. "Esta fue la primera muestra y de aquí para adelante", afirmó.
En su momento, Blanca Cruz, licenciada en Educación Especial en el área de audición y lenguaje y especialista en clavecín, compartió: "Nuestros esfuerzos han dado frutos. Este es un sueño hecho realidad, tenemos las puertas abiertas para seguir creciendo y alcanzar las metas que nos propongamos".
Señaló que los alumnos reforzaron los conocimientos que ya poseían. Todos ya practicaban piano, por lo que ya han estudiado postura, posición y técnica.
David Rodríguez de la Peña aseveró que desde hace tiempo deseaban abrir este curso, pero no contaban con los maestros expertos. Ahora, gracias al exconservatoriano Gabriel Sierra y la maestra Blanca, se pudo lograr. "Nos sentimos muy satisfechos y orgullosos. Gracias también a los padres de familia que apoyan a sus hijos".
Por su parte, los padres de los niños y jóvenes disfrutaron el recital. Agradecieron a las autoridades del INBA y a los profesores el haber creado el curso propedéutico Piano para todos que permite el desarrollo de sus hijos.
La madre de Juan Pablo Medina mencionó que su hijo ama el piano y le ha hecho mucho bien, ya que tenía problemas de movimiento en su mano izquierda. El padre de Axel Javier Amaro Gutiérrez afirmó estar muy orgulloso de ser papá de un niño como él, que tiene una memoria privilegiada y cada día lo sorprende. Axel toca además la guitarra, el bajo y el violín y se dijo encantado de ser alumno del CNM.
Una de las sorpresas de la noche la dio Samanta Taré Solano Ramírez. La pequeña de 9 años tocó al piano El feo de Demetrio López y La llorona, temas que también cantó con una privilegiada voz que dejó a los asistentes con un nudo en la garganta.
Luis Javier Díaz García, Ricardo Santacruz Martínez, Jesús Alfredo Toriz López, Axel Javier Amaro Gutiérrez, Alexa Regina Granados Herrera, Mariana Ximena Palacios Román, Cristopher Luis Pérez García, Juan Pablo Medina Gama, Omar Alejandro Vázquez Betancourt, Samanta Taré Solano Ramírez son los diez alumnos de Piano para todos, quienes al final de sus respectivas interpretaciones formaron un ensamble de yembés con los que tocaron bajo la dirección de Sierra Fincke varias obras.
El recital concluyó con un encore de La llorona, en el que nuevamente Samanta tocó y cantó, igual que el resto de sus compañeros. Durante la interpretación se invitó a los asistentes a participar en la pieza.
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