Interview: Maritza Vernaza of SIEMPRE ERA NOCHE at Teatro Anita Villalaz

Maritza Vernaza ha sido actriz durante 25 años. Es además performer, psicóloga y gestora cultural. Es una artista multifacética y en constante formación. La mayor parte de su trabajo como performer y actriz de teatro se caracteriza por la exploración de temas como identidad, igualdad de género y memoria colectiva, a través de procesos donde es creadora e intérprete. En "Siempre era noche" del dramaturgo Diego Montoya , la primera parte de su trilogía "Aquellas feroces obscenidades" , una obra poderosa en cuanto a argumento y poética , Maritza Vernaza nos provee de elementos que van calando en lo profundo de nuestra consciencia y nos hacen parte de un acto en donde lo introspectivo y lo performativo se manifiestan en escena a través de su actuación.

Broadway World: Construir un personaje es siempre una tarea compleja, en su caso, como actriz y psicóloga ¿Cómo se da este proceso desde que lee el guión por primera vez hasta que finalmente lo interpreta en el escenario?

Maritza Vernaza: Al leer el guión en una primera etapa tomo nota de la información que me da el autor sobre los personajes, sus relaciones, las circunstancias que atraviesan, los temas que presenta, el tiempo y todo aquello que considere relevante. Luego entro en un proceso de investigación y profundización en mi personaje, sus necesidades, conflictos, su objetivo y la forma en que trata de alcanzarlos. Para mi este proceso no acaba con el estreno, sino que sigue hasta la última función. Trato de estar abierta a dejarme sorprender y seguir descubriendo a mi personaje.

BW: Desde el punto de vista del arte performativo en comparación al teatro ¿Cómo se canaliza en usted el mensaje que se intenta transmitir con su performance y cuales han sido los que más le han dejando un impacto al público desde su óptica como artista?

MV: La creación de una performance surge en mi como una pulsión, una inquietud sobre algo que me afecta directamente y a veces de manera muy íntima, por lo que es muy personal. Cuando actúo en teatro y cine también tomo como referencia mi verdad, mis experiencias, mi memoria emocional y mis recuerdos en la construcción del personaje, por lo que se torna personal. Ambas expresiones artísticas requieren autenticidad y honestidad.

Entre los performances que más han impactado, por decirlo de alguna manera, está el de las apariciones de la Virgen. Es un performance que hice en el 2013 en relación a la virgen gigantesca que Martinelli quería construir para ganar adeptos. El público de la peatonal se mantuvo cerca de la virgen y comentaban entre sí de qué se trataba, se adueñaron del performance.

BW: En la obra "Siempre era noche" su interpretación puedo definirla como poderosa, con momentos que van desde lo crudo hasta lo onírico. ¿Cuáles fueron las claves para esta interpretación ?

MV: Primero el deseo de dar vida a un texto hermoso, poético, fuerte, retador y poco convencional. Además una sincronía especial con el director, con quien comparto el gusto por el lenguaje simbólico y la importancia dada al rol de la actriz como creadora, no solo como interprete. Por otra parte, una gran dedicación a la construcción de personaje y la experimentación.

BW: Cuéntenos de sus comienzos en el teatro y la performance.

MV: Empecé en el teatro en 1996 interpretando a Marianela de la obra de Benito Pérez Galdós. En aquel entonces no tenía idea de la relevancia que tendría esta profesión en mi vida. Luego hice otras obras y me fui a Brasil a estudiar artes escénicas en Sao Paulo durante un año. Allí obtuve referencias de otras formas de hacer teatro que marcaron mi desarrollo como actriz.

Casi siempre he hecho teatro experimental. Pienso que hay mucha cercanía entre el teatro experimental y la performance. Por ejemplo, en ambos interviene un proceso de búsqueda personal, el uso de recursos no convencionales y la creación colectiva. Participar en teatro experimental me permitió descubrir que disfruto más escribir con imágenes que con palabras.

BW: Cómo psicóloga y profesional de las artes escénicas, ¿puede aportarnos algunas ideas de cómo el teatro y la performance son también un vehículo para la sanación interior?

MV: Considero que el arte (sea teatro o performance) tiene el potencial de presentar la visión del artista de una manera viva, estética, única, además de generar emociones y acercarnos como seres humanos. Más que un vehículo para la sanación interior, considero que es un vehículo para relacionarnos, vernos a nosotros mismos, sentir, cuestionarnos, emocionarnos.