Cuando lo bufo parecía denostado y era inminente la llegada de la ópera seria del Romanticismo, Donizetti demostró que todavía podían reformularse y explotarse las posibilidades de este género. Don Pasquale es a menudo considerada la última gran ópera bufa de la escuela italiana belcantista. Ambientada en la Roma del siglo XIX, con un protagonista arquetípico (el anciano enloquecido de amor, atraído por una mujer más joven) es el título número 69 del genio de Bérgamo. Fue estrenado en 1843, en el Teatro Italiano de París, ciudad de residencia de Donizetti en la etapa final de su carrera compositiva.